Rockola en línea #4

16 julio, 202120 julio, 2021 Arte y Cultura Música

Lanzamientos variados y análisis breves y concisos en tiempos de fugacidad

Por Claudio Kobelt

En esta edición de Rockola en Línea, destacamos dos discos que nos han gustado mucho y ansiamos compartirles: uno de ellos fue publicado en el 2020, y el otro durante el año en curso. Son dos registros muy distintos en muchos aspectos (sonoro, estético, estilo, propuesta, etc.), pero que tienen algunos puntos en común: fueron editados en este periodo de pandemia; de manera completamente independiente – sin sellos discográficos involucrados -; se trata de grupos argentinos que vienen hace años recorriendo la escena, reformulándose y haciendo un gran camino; y ambos son trabajos excelentes, de propuestas movilizadoras, y la muestra viva de una llama que, a pesar tantos contratiempos, resiste a apagarse: la de la nueva música independiente argentina con búsqueda y calidad.

Serpiente – Donde Pertenecemos (2021)

Solo tres temas tiene Donde Pertenecemos, el último disco a la fecha de Serpiente, y con solo esa triada asesina de canciones oscuras y movedizas se posicionan como uno de los mejores discos argentinos del 2021. Una de las claves para esta afirmación es el sonido hi-fi con el que suenan esas tonadas de darkwave dinámico y activo. Todo es claro, las letras llegan, la voz apuñala cuando tiene que hacerlo, y todos los instrumentos se distinguen en conjunto e individualidad.

Otro elemento a destacar es la contundencia, gracia y seguridad con la que el grupo ejecuta: Serpiente tiene la exquisitez del new wave, el perfume negro del post punk, y la energía y la furia de una banda de garaje.

El EP en cuestión abre con “Motosierra”, una canción rutera para huir de todo, a máxima velocidad, yendo a “donde pertenecemos”; le sigue “Agua”, donde la melodía baja un cambio y el sonido propone una atmósfera hipnótica y misteriosa; y cierra “Las Heras”, donde una guitarra asesina y una base imparable nos inducen al baile frenético.

Podríamos trazar una línea que relacione este disco con lo propuesto por Siouxsie & the Banshees en los primeros años de la década ochenta, algo del post punk español de esa misma época de grupos como Alaska y los Pegamoides y Parálisis Permanente, e incluso atrevernos a identificar un vínculo sónico con el único material editado a fines de esa década por el grupo argentino Euroshima; pero no debemos quedarnos ahí, ya que todo eso es tan solo un intento de referencia en cuanto a estilo: este álbum suena moderno, directo, puro y fresco.

Cuando escuchen este EP, con el volumen en diez, seguro compartirán el sueño de quien suscribe: Que haya un nuevo disco de Serpiente pronto, más canciones, poder verles tocar en vivo, seguirlos donde sea…que haya Serpiente para rato, creando esta música vibrante, que es Donde Pertenecemos.

https://serpienteba.bandcamp.com/album/donde-pertenecemos

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Chori Pepas – Hace 30 años que son los 90’s (2020)

A fines del 2020, el grupo argentino Chori Pepas editó su quinto disco a la fecha, el hermoso Hace 30 años que son los 90’s. Este es un registro valioso, personal, delicado, y arriesgado que deberíamos dedicarnos a escuchar. Y digo “dedicarnos” porque es un álbum que requiere un compromiso tanto en la atención a las letras y la construcción sonora, como desde lo emocional. Estar dispuestos a conectarse con ese espíritu y dejarse movilizar.

Los Chori abandonan por un rato esa psicodelia lúdica de orquesta mutante que exhibieron en sus anteriores trabajos, para explorar una melancolía desgarrada en baladas intimistas con el piano y la voz como grandes protagonistas. Escuchar esas tonadas donde el cantar se quiebra sobre las notas, es como espiar atrás de una puerta entreabierta los monólogos existenciales de un trovador sobre la muerte y la soledad. El disco es un viaje de ojos cerrados sobre paisajes internos, un desplazamiento lento sobre un campo de flores grises con un aroma entre trágico y dramático.

En el track cinco, “Hablando con la almohada”, el disco se amplia, lentamente, dando paso a nueva instrumentación, ritmos y sonido, como si esa puerta tras la cual estábamos espiando terminara de abrirse y el paisaje se completara. En “Triangulo dramático” llega el baile con una canción grácil sobre el trabajo del psicólogo Stephen Karpman, un hit mid-tempo para danzar exorcizando (o haciéndonos cargo). En los dos últimos temas, se siente como esa puerta vuelve a cerrarse, muy despacio, y se tiende un enlace con el comienzo del álbum, en esas tonadas sensibles sobre el transcurrir del tiempo y lo que permanece inalterable, el presente como el futuro fracasado de un pasado que no deja de existir.

Hace 30 años que son los 90’s no es un disco para limpiar la casa, para escuchar mientras navegamos por internet, o para ir “picando” para ver como son las canciones. Es una obra que requiere de compromiso, conexión, y total apertura. Un manifiesto de política emocional. Un viaje del que, si logramos subirnos, no querremos bajar jamás.