Poesía Antídoto ante la resistencia para recordar el dolor

Cecilia Azzolina nació en Paraná, Entre Ríos en 1992. Es actriz, guionista y estudiante del Profesorado de Artes en Teatro en la Universidad Nacional de las Artes. Su primera novela, “Todas las cárceles”, se publicó en 2019 por la Editorial Barenhaus. En esta nota, un híbrido entre entrevista y reseña, vamos a hablar sobre “Fluencia” publicado en 2021 por Peces de Ciudad, su primer poemario.

Por Stefania Agoglia

Conformado por bocanadas de aire. Grandes bocanadas que al ser escritas, al estar todas juntas crean un viento arrasador. Los poemas convocan diferentes experiencias y sentimientos que pronto logran hacer mella en quien los lee. Las palabras bullen, duelen porque “el vértigo resuena como un poema” y Fluencia nos mantiene en un precipicio al que observamos a través del ojo ajeno que cuando es sincero siempre confluye en el propio.   

"Sufrimos
en silencio
toda la fragilidad
obligada
frente al mundo
que tiembla."

La Linterna: ¿Sos actriz, guionista, escritora de ficción, incursionaste en diferentes maneras para expresarte artísticamente, cómo llegaste a la poesía?

Cecilia Azzolina: Escribir un libro de poesía era una especie de asunto pendiente y algo totalmente desconocido para mí. Si bien había escrito poemas antes, nunca con el propósito de publicar. Lo primero que escribí fue poesía. Era muy chica. Un día descubrí una máquina de escribir en casa y empecé a usarla a escondidas, durante un año. Después dejé de hacerlo. Sentía que lo que hacía estaba mal. Era un secreto que me pesaba demasiado y todo lo que escribía era muy sanguinario, me daba miedo que alguien encontrara esos papeles. Creo que reprimir el impulso durante tanto tiempo potenció mi deseo de volver a la escritura.

"Hay cosas que me perturban
en este mundo,
por ejemplo,
el sonido de la puerta chirriando
lo fugaz
los santos y los rezos,
la falta selectiva de memoria,
los domingos
a la hora de la siesta,
los excesos y el destino.
La sequía, la náusea
y los simulacros.
Las fiestas de fin de año,
los fuegos artificiales,
la hora no hora, el sí no,
el como si
los muertos vivos
que beben la sangre,
las alfombras
y sus fibras me perturban,
el recuerdo
de la manera en que mi madre
me miró por última vez
la noche en que murió(...)"


LN: ¿Qué diferencias hay entre la escritura de ficción y la poesía?

CA: En mi caso, el ritmo cambia de un formato a otro. Hay algo que me pasa con la poesía que no me pasa con la narrativa, creo que tiene que ver con darle lugar a lo espontáneo. Pero a esa permeabilidad no la puedo forzar, nace de la emoción. Por eso la poesía es más autobiográfica. En cambio, en la ficción encuentro otro vuelo; puedo jugar con la imaginación. Sin embargo, el proceso de escritura es diferente, más denso y respetuoso de la forma. Igual creo que la poesía puede estar presente en todos los géneros, de hecho los híbridos me resultan más interesantes. Cuando uno no sabe muy bien qué está leyendo, solo se deja llevar por la historia.

LN: ¿Qué inspiró la creación de Fluencia?

CA: Leí sobre un concurso de poesía federal impulsado por la editorial Peces de Ciudad y eso me motivó a corregir varios poemas que ya tenía escritos, y a escribir otros para completar la propuesta. Me di cuenta de que la mayoría de los poemas bordeaban una misma geografía, Paraná, y que los temas más recurrentes eran su río, su naturaleza, la soledad, la nostalgia, un desencuentro amoroso que me dolió mucho, también. Supongo que en ese momento necesitaba extirpar todo eso.

"Me tuve que ir
tuve que pensar
en otro tipo de huida,
me dolieron los pies
cuando los separé de la tierra
arcillosa
la única libre.
Algo se desprendió en mí,
mi cuerpo se hizo coágulo
el día en que arranqué con fuerza
el rizoma piloso,
lejos del lugar que me dio nombre.
Todavía sueño
que soy una niña
que corre descalza en el barro (...)"

LN: El poemario toca temas muchas veces difíciles de abordar, ¿cómo fue el proceso de escritura?

CA: Fue un proceso un poco sinuoso. Me cuesta mucho el ritual de sentarse a escribir con una idea premeditada. Al principio todo tiene la dinámica de una improvisación, recién cuando llega el momento de la corrección me enfoco en la forma. Con Fluencia, siento que la resistencia a recordar ciertos daños tuvo que romperse, y eso implicó además un tiempo de maduración. Hay varios escenarios que surgieron durante esa búsqueda. Algunos corresponden a fragmentos de la realidad, otros son una fantasía. Cuando una imagen verídica me resulta difícil de recuperar, la invento. Porque a veces las palabras no me llegan, o se quedan a mitad de camino. No poder materializar esas experiencias es bastante agobiante, y es esa incapacidad del momento lo que me hace insistir.

"Las olas rompen contra las piedras
del acantilado.
Un sonido estridente estalla
adentro de la tierra,
se vuelve polvillo
despega fugaz al viento,
se estaca en la noche."

Ficha técnica

• Título: Fluencia

• Autora: Cecilia Azzolina

• Editorial: Peces de Ciudad

• ISBN: 978-987-4481-44-3

• Edición: 2021

• Número de páginas: 45

Invitame un café en cafecito.app

Deje su comentario

No se publicará su e-mail. Los campos obligatorios están marcados con un *.