Un completo desconocido
Un completo desconocido

Un completo desconocido

Con una muy condescendiente retahíla de anécdotas que salvaguardan la imagen de Bob Dylan, James Magold pincela con dulzor ATP la etapa consagratoria de uno de los artistas más influyentes del siglo XX, sin macular el barniz de su bohemia

Germán Ríos-Morales


¿Se puede ver Un Completo Desconocido sin saber algo, lo mínimo, de Bob Dylan? Si. Aunque este film parece estar hecho para que sus fans se deleiten con la fotografía de la época, excelentemente recreada, de la escena neoyorkina de mediados de los 60 ‘s. Una mirada bastante condescendiente, “occidocentrista”: el mundo era un hervidero, la Guerra Fría estaba más caliente que nunca, y es en este contexto donde aparece un muchacho con una sensibilidad excepcional, que a fuerza de canciones (nos podemos hacer una panzada con la cantidad que incluyeron en la película) intenta cambiar el mundo. El director, James Magold, si bien no se apega tanto al rigor histórico de los hechos para los más puristas, carga la película con simbolismos y guiños que la ornamentan casi constantemente, subrayando donde parece no hacerlo. 

El Dylan que nos presenta Magold, deviene entonces en un cuento de hadas con guitarras que se electrizan (electrocutando al público, según la prensa del momento) y que muchos críticos e historiadores de la música, consideran como el nacimiento del Rock. Mito va, mito viene, a la postre, es magistral como ese cambio rotundo de parámetros se nos hace sentir dentro del film.



Con todo, resulta poco verosímil que durante todo el proceso creativo desde la publicación de “Blowin’ in the wind” hasta el Festival de Folk de Newport, la poesía de Dylan haya calado tan hondo en millones de personas sin causar estragos aparentes en la personalidad de su genio creador. La parquedad con la que Timothée Chalamet transforma sus emociones y convicciones, retrata a un Dylan un tanto brusco, engreído, pero que no abusa de su carisma ni de su fama para buscar su propia redención. Así mismo acierta con esmero la representación no menos dificultosa de la guitarra, la voz y la armónica de Bob. 

“Un completo desconocido” resulta entonces en una sosa figuración dialéctica donde Dylan demuele los cánones de la música folk sin salir prácticamente herido, donde lo nuevo y lo viejo, lo tradicional y lo moderno, lo enchufado y lo desenchufado se baten a duelo con armas siquiera cargadas. Su halo bastó para conquistar y seguir conquistando generaciones enteras. Es Bob Dylan, santo y sacrílego, como lo fue, como lo es.



Ficha Técnica

A complete unknown 

Estados Unidos, 2024

Dirección: James Magold

Protagonistas: Timothée Chalamet, Edward Norton, Elle Fanning, Monica Barbaro

Duración: 141 minutos

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